jueves, 15 de agosto de 2013


Inédito en democracia, fallo de la Corte Suprema en Chile permite la violación al derecho de expresión.

 

Con fecha 13 de Agosto del presente año, la 3era sala de la Corte Suprema ha rechazado el Recurso de Protección interpuesto en contra de Luis Riveros Cornejo, Gran Maestro de la Gran Logia de Chile quien expulsó a un integrante de la masonería miembro del Real Arco por haber emitido y circularizado una opinión contraria a un informe emitido por el Gran Orador, el cual contenía innumerables errores e imprecisiones en la doctrina masónica.

Este fallo que confirma la sentencia de la Corte de Apelaciones apelada de fecha 31 de Mayo de 2013 fue acordado con el voto en contra del Presidente de la Sala  y redactor del fallo señor Sergio Muñoz y del abogado integrante señor Guillermo Piedrabuena, quienes fueron de parecer revocar la sentencia apelada y acoger el recurso de protección dejando sin efecto la decisión impugnada y restableciendo en plenitud los derechos al recurrente señor Pedro Morales. Por el contrario el ministro Héctor Carreño, el ministro suplente Alfredo Pfeiffer y el abogado integrante Alfredo Prieto estuvieron por rechazar el recurso.

Este hecho se agrava tratándose de la Gran Logia de Chile, institución masónica que declara en sus principios ser una permanente defensora de la libertad, igualdad y fraternidad de la humanidad.

Causa 4808-2013 Corte Suprema


Causa 26319-2013 Corte Apelaciones

domingo, 4 de agosto de 2013

La masonería, como Orden iniciática, es espiritual; aunque muchos de sus miembros actuales lo ignoren, el simbolismo masónico nos indica claramente que su objetivo sería la construcción de un Templo en el interior de cada iniciado, tallando (o transmutando) esa Piedra Bruta que hay en el fondo del ser humano. En otras palabras, buscar su perfeccionamiento a través de un proceso de iniciación espiritual que conduciría al masón a cumplir su Deber de buscar la transformadora Palabra Perdida, oculta en el fondo de nosotros mismos, valiéndose de métodos rituales y simbólicos. Es precisamente en el significado profundo de sus símbolos, signos y alegorías –que permitirían trascender nuestras limitaciones y condicionamientos mentales– donde reside el gran secreto de la masonería, como nos explican notables masones, desde el caballero Ramsay a Christian Jacq. Por ello, tal secreto no puede ser traicionado ni comprendido por nadie que no esté preparado internamente, y sólo podrían acceder al mismo los adeptos que se entregan a la construcción iniciática de su Templo interior. Ni que decir tiene que demasiados masones han ignorado u olvidado este objetivo esotérico (interno). Y, mientras muchos de ellos se han entregado a la tarea exotérica (social) de intentar perfeccionar el mundo para transformarlo en un Templo armónico, otros se han dedicado a imitar a aquellos mercaderes a los que Jesús expulsó del Templo de Jerusalén, un proceso de corrupción no muy distinto al que han sufrido la práctica totalidad de las instituciones humanas, que inicialmente estaban alentadas por los más nobles ideales.

A.G.

martes, 16 de abril de 2013



Enciclopedia de la Francmasonería.- A. Gallatin Mackey



Con excepción del grado del Maestro, no existe otro grado en la Masonería tan extensamente difundido, o que sea tan importante en su valor histórico y simbólico, coma el Arco Real, o, como se le ha llamado, flor razón de su significación sublime el ‘Arco Real Sagrado” Dermott le llama ‘la raíz, corazón, y esencia de la Masonería,” y Oliver dice que es “indescriptiblemente más augusto, sublime, e importante que cualquiera que le precede, y es, en efecto, la cima y perfección de la Masonería Antigua.” Se encuentra, efectivamente, en cada uno de los Ritos, en alguna forma modificada, y algunas veces bajo nombre diferente, pero conservando siempre esas mismas relaciones simbólicas de la Palabra Perdida que constituyen su carácter esencial.

Cualquiera que estudie cuidadosamente el grado del Maestro en su significación simbólica, sé convencerá que se encuentra en una condición mutilada, es decir que es imperfecto e incompleto en su historia, y que, terminando bruscamente en su simbolismo, deja a la mente en espera de algo más que es necesario a su perfección. Esta deficiencia la suple el grado del Arco Real. Así es que, cuando tuvo lugar la unión en Inglaterra, en 1818, entre las dos Grandes Logias rivales, no obstante que existía una disposición hereditaria y vigorosa en la parte de los Masones Ingleses con el fin de preservar la simplicidad del Antiguo Rito de York limitando a la Francmasonerí a a los tres grados simbólicos, fué necesario definir la Masonería del Orden antiguo como consistente de tres grados, incluyendo el Arco Real Sagrado.






Hubo un tiempo en que el Arco Real no existía como grado independiente, sino que era una parte complementaria del grado del Maestro, al que dio la necesaria realización. Ramsay lo introdujo en los grados superiores del continente; Darrnott lo creó y estableció para el uso de su Gran Logia; y que Dunckerley se dice lo desunió del tercer grado en la Gran Logia Legal de Inglaterra.

El método preciso y época de su separación después de haber sido establecido por tercera vez, como grado independiente en Inglaterra y América, constituye una parte importante e interesante de la historia de la Masonería.

Es evidente que la existencia del Arco Real como grado independiente y distinto, data de una época comparativamente moderna. En ninguno de los registros antiguos manuscritos de la Masonería existe la referencia más insignificante de él, a la vez que Anderson no lo menciona de ningún modo en su historia de la Orden. La palabra verdadera, que constituye el carácter esencial del grado del Arco Real fue encontrada por el Dr. Oliver en un retablo antiguo del Maestro Masón de fecha aproximada al año 1725 por lo que concluye así (Orden de Inglaterra R A., p. 20) “que la palabra, en esa época no había sido apartada del tercer grado y transferida a otro” en otras palabras, que el grado del Arco Real no habría sido construido entonces.

El período último en que se menciona en Inglaterra que él pudo encontrar, fue en el año 1740. exactamente dos años después de que aconteció el cisma que separó la Logia antigua de la Gran Logia Moderna, uso los títulos generalmente aceptados, sin ninguna referencia a su propiedad y atribuye su formación al cuerpo anterior. Stone, (Cartas Sobre la Masonería, p. 50,) que posee un conocimiento perfecto de la historia Masónica, atribuye su origen al Capitulo Primordial de Arras. Pero ese cuerpo fué establecido por el joven Pretendiente en 1747, y Oliver, como se demuestra, reconoció la existencia del grado en Inglaterra siete años antes, Sin embargo, la verdad es que, Ramsay, mucho antes habla incorporado el grado del Arco Real bajo un titulo diferente en sus grados superiores, y no hay duda que Dertnott, que fué realmente el inventor del sistema Inglés, debía a él muchas de sus ideas lo mismo que aconteció posteriormente a Dunckerley cuando compuso el Arco Real para la Gran Logia Legal pero el sistema de Ramsay era muy diferente en sus detalles principales al de ambos. Ramsay, hacia la época de la innovación de Dermott, había visitado Inglaterra, e intentado introducir sus grados superiores, los que fueron rehusados por la Gran Logia Legal y hay muchas razones para creer que él comunicó a la Masonería separatista una parte principal de las invenciones que él había implantado en la Masonería del continente.

Oliver dice que el Arco Real que fué inventado por los separatistas, “aunque contenía elementos de sublimidad suprema, era imperfecto en su construcción y poco satisfactorio en su resultado lo cual demostraba, por el estado imperfecto e informa en que se encontraba entonces, que el grado estaba en los primeros años de su infancia, Los anacronismos que tenía en abundancia, y el estilo negligente en el que sus partes se encontraban dispuestas, revelaban su origen reciente. Realmente, no cabe duda que fué un atentado, el combinar varios de los grados continentales de la Masonería sublime en uno solo, sin atender al orden del tiempo, propiedad y estilo conveniente en su disposición, o cualquiera otro principio fundamental; y por esta razón encontramos en el grado, tal como fué construido originalmente, una confusión insuperable del todo en los acontecimientos que se conmemoran en el Arco Real de Ramsay, los Caballeros del Arco Noveno, del árbol Ardiente, del Oriente o la Espada, de la Cruz Roja. el Compañero Masón Escocés. el Maestro Selecto, la Espada de la Cruz Roja de Babilonia, la Rosa Cruz, etc,”.

Como a fines del año de 1758, la Gran Logia Constitucional no tenía grado del Arco Real, pues en ese año el Gran Secretario declaró que nuestra sociedad no es Arco Antiguo ni Arco Real ;‘ y en la lectura del tercer grado preparado por Anderson y Desaguliers dice que “lo que existía perdido se ha encontrado ahora,” lo cual significaba, dice Oliver, que la palabra del maestro masón se otorgó al Masón recientemente ascendido en las últimas ceremonias del tercer grado, lo cual prevenía la necesidad del grado del Arco Real.

Pero hacia el año 1770, Tomás Dunckerley, que había sido autorizado por la Gran Logia Constitucional, o los “Modernos,” para inaugurar un nuevo sistema de lecturas, comenzó sus modificaciones del antiguo sistema, las que se han practicado hasta la fecha y que consisten en separar la palabra del Maestro del tercer grado, Esto dio origen a la necesidad de un nuevo grado; por lo que Dunckerley, copiando de Ramsay, de Dermott, y de su propia invención, fabrico el grado del Arco Real para los Masones Modernos; siendo una Innovación violenta, cuyo éxito se debe únicamente a su gran popularidad que tenía en la Orden y la influencia del Gran Maestro. Oliver cree, por buenas razones, que la introducción del grado del Arco Real en el sistema Moderno no podría haber sido anterior a la dedicación del Salón de los Francmasones en 1776. Diez años después de que los reglamentos del grado fueron establecidos por primera vez, y en que la unión de las dos Grandes Logias en 1813, tuvo lugar, fué reconocido formal y oficialmente el Arco Real Sagrado, como una parte de la Masonería del Orden Antiguo, el que ha permanecido desde entonces en dicha forma.

El resultado de nuestras investigaciones, en las que hemos confiado principalmente en la autoridad del inteligente Oliver, es que, hasta el año 1740, el elemento esencial del Arco Real constituía parte componente del Grado de Maestro, y era, por supuesto, su parte concluyente; que como grado no fué reconocido del todo siendo solamente el complemento de uno; y que en la época en que fué separado de su relación original y elevado a la posición e investido con a forma de un grado distinto por el cuerpo que se llamaba ‘la Gran Logia de Inglaterra según las Antiguas Constituciones,” y que se conoce familiarmente tomo la Logia de Dermott o la Gran Logia Athol, y frecuentemente corno ‘los Antiguos;” que en 1776 un grado semejante construido por Dunckerlev, fué adoptado por La Gran Logia Constitucional. o los “Modernos,” y que en 1813 fué reconocida formalmente como parte del Rito de York por a Gran Logia Unida de Inglaterra.


En América, la historia del grado siguió a la del sistema inglés. Como la mayor parte de las Logias americanas derivaban sus Patentes de la Gran Logia Athol, el Arco Real debe haber sido introducido en el momento de su constitución, El gobierno del grado estuvo por mucho tiempo bajo las ordenes de las Logias del Maestro, y muchos años transcurrieron antes de que fuese conducido de ahí y colocada bajo el control de cuerpos distintos llamados Grandes Capítulos. En América, no fué sino hasta 1798 en que se fundó el Gran Capitulo y muchas Logias persistieron por algunos años en que les fuese conferido el grado del Arco Real bajo La autoridad de sus Poderes de Las Grandes Logias.

Conservado en todas partes la identidad en su significación simbólica, el Arco Real varia en diferentes países en sus detalles históricos.


El grado de Ramsay, del que se originaron todos los sistemas continentales, es enteramente diferente del que se practica en la Gran Bretaña, en Irlanda, y en los Estados Unidos.


Su representación puede encontrarse en el grado décimotercero, o Caballero del Arco Noveno del Rito Escocés Antiguo y Aceptado.

En Inglaterra, Escocia. y los Esta¬dos Unidos, la circunstancia en la que se funda el grado, o, en el lenguaje técnico, la leyenda, es la misma; pero La organización preliminar es diferente en cada país.

En Inglaterra en 1834 se hicieron varios cambios considerables en las ceremonias de exaltación, pero se conservaba el diseño general del sistema. El grado es el cuarto en la serie masónica, y el Maestro Masón que ha permanecido así por doce meses, es elegible para la exaltación. Los oficiales principales del Capítulo ingles son: los tres Principales, Zorobabel, Ageo y Josué; tres Residentes Templarios y dos Escribas, Ezra, y Nehemiah un Tesorero y un Bedel.

En Escocia, los grados preliminares son; los de Maestro Super-Excelente, Excelente, Ex-Maestro. y Marcador, y los oficiales principales son los mismos que en Inglaterra.

En Irlanda, la leyenda era anteriormente diferente de la de Inglaterra, y fundada en sucesos registrados en las Crónicas del Segundo Libro (xxxiv p. 14,) en donde se dice que Hiliiah “encontró el libro de la ley de Dios dado por Moisés.” La fecha de este grado era por Lo tanto el año 624 A. C., o sea noventa años después que la nuestra. Los grados preliminares a calificativos eran: Super Excelente y Excelente y Ex-Maestro. Pero el sistema irlandés fue alterado hace algunos años, y se adoptó un nuevo Rito, algo semejante al americano. Los oficiales no difieren materialmente de los del Capitulo inglés y escocés.

En América, la leyenda es la misma. tal como la inglesa, aunque varía en algunos de sus detalles. Los grados preliminares son: Maestro Excelentísimo, Ex-Venerable y Aprobado; y los oficiales principales son: Sumo Sacerdote, Rey, Escriba, Capitán de la Hueste, Viador Principal Capitán del Arco Real, y los Tres Grandes Maestros de los Velos.

Corno ya he dicho, como quiera que la leyenda o base histórica variase en los diferentes Ritos. en todos ellos era idéntica la significación simbólica del Arco Real. Por lo mismo, la Construcción del segundo Templo, que es un símbolo tan prominente en los sistemas inglés y americano, y enteramente conocido de igual modo en el continental, no puede considerarse como punto esencial en el simbolismo del grado. Es importante en los sistemas en que se encuentra, pero no es esencial. El verdadero simbolismo del sistema del Arco Real se funda en el descubrimiento de la Palabra Perdida.

Nunca es por demás e! repetir que la PALABRA es, en la Masonería, el símbolo de la VERDAD. Esta verdad es el gran objeto que persigue la Masonería el principio y tendencia de todas sus investigaciones la recompensa prometida a todos los esfuerzos masónicos, y que se busca diligentemente en todos los grados a que se aproxima constantemente pero nunca se comprende perfectamente e íntimamente, hasta que al fín, en el Arco Real, los velos que cubren el objeto de nuestra investigación se descubre ante nuestra vis¬ta, y se revela el inestimable premio.

Esta verdad, que es el gran objeto de las investigaciones de la Masonería, no es precisamente la verdad de la ciencia, o la verdad de la historia, pero es la verdad más importante que es sinónimo del conocimiento de la naturaleza de Dios, es esa verdad que se encuentra en el Tetragrama Sagrado, o nombre omnipotente, comprendiendo su significación su existencia eterna, presente, pasada y futura, a la que alude al declarar a Moisés, me he presentado a Abrahan, Isaac y a Jacob por el nombre de Dios Omnipotente; pero no me conocían por mi nombre de Jehová.

El descubrimiento de esta verdad es entonces, el simbolismo esencial del grado del Arco Real. Donde quiera que se practique, y bajo algún nombre peculiar el grado se encuentra en todos los Ritos de la Masonería; este simbolismo permanece. Pero no obstante, la leyenda puede variar, las ceremonias de recepción y los pasos preliminares de iniciación pueden diferir, pero la consumación es siempre la misma el gran descubrimiento que representa el conocimiento de la VERDAD.

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Pedro P. Dollar:.
Por Cuba, con Dios y la Masoneria

lunes, 1 de abril de 2013



 INTRODUCCIÓN AL ARCO REAL
Y EL RITO DE YORK
Por el M.·.R.·.H.·. León Zeldis Mandel

Debo comenzar advirtiendo que la constitución de los grados masónicos conocidos como el Arco Real es distinta en diferentes países. Por lo tanto, conviene aclarar ciertos conceptos fundamentales, para comprender en forma clara lo que es el Arco Real en el mundo y cómo se ha desarrollado hasta llegar a su forma actual.
Todos los grados llamados “superiores, es decir, los que se pueden alcanzar sólo después de haber obtenido la calidad de Maestro Masón (y todavía sin referirse a Ritos), fueron creados con posterioridad a la fundación de la primera Gran Logia en Londres, en 1717. Todo el siglo XVIII y comienzos del XIX se caracterizaron - en cuanto a Masonería se refiere - por una verdadera explosión de actividad y creación, con el establecimiento de cientos si no miles de Logias en toda Europa, América y otros lugares, cada una de las cuales trabajaba en forma independiente y ensayaba libremente tal o cual ceremonia traída generalmente por algún visitante de otro país o de otra ciudad. Muchas de estas logias funcionaban en forma esporádica, se dividían, fusionaban y dejaban de existir en forma totalmente autónoma.
No existían el control y la disciplina actuales, y cuando una Gran Logia se constituía en algún lugar, debían pasar muchos años antes que tuviera éxito en imponer cierto orden y obediencia sobre las Logias que la componían. Hubo casos de logias que trabajaron durante decenas de años sin afiliarse a ninguna Gran Logia, y hubo aquellas, como en el caso de la Logia de York (en Inglaterra), que reivindicaron para sí las prerrogativas de una Gran Logia. Muchas logias extendían carta constitutiva a otras logias, asumiendo el título de Logia Madre.
Los "grados" que se introdujeron en esa época (y hubo cientos de ellos) - consistían simplemente en una ceremonia que conducía a un título específico. Algunas de estas ceremonias estaban destinadas a explorar y ampliar aspectos de la leyenda Hirámica del tercer  grado. Otras ceremonias tenían referencia a distintas leyendas de origen operativo, que no fueron incluidas en los tres grados simbólicos. Otro grupo de ceremonias estaban relacionadas con leyendas de las Órdenes de Caballería y con los Templarios. Finalmente, muchas ceremonias adicionales fueron creadas para aprovechar las características de secreto y fraternidad de nuestra Orden con el objeto de estudiar y propagar teorías alquímicas, cabalísticas, rosacruces y otras. Muchas de esas ceremonias desaparecieron sin dejar rastro. Otras fueron reunidas y sistematizadas, para crear los diversos Ritos Masónicos; siendo el ejemplo más famoso el Rito Escocés Antiguo y Aceptado. Sin embargo hubo muchos más, algunos de cuales siguen en existencia hasta el día de hoy, como el Rito Adonhiramita (practicado actualmente sólo en Brasil), Rito Francés Rectificado, el Rito Escandinavo, el Rito Bwin en Inglaterra, y otros.
El llamado Rito York es un nombre empírico creado en los Estados Unidos de América para denominar los grados superiores que siguieron siendo trabajados en las islas británicas, después de la primera "explosión" mencionada recién y el decantamiento posterior así como algunos grados adicionales de origen estadounidense. A diferencia del Escocés, los grados yorkinos nunca fueron ordenados en una escala ni numerados, sino que se agrupan en núcleos según su tema central. Un Hermano puede tomar algunos de estos grados, sin necesidad de tomar otros. Lo que tienen de común es la necesidad de comenzar tomando el grado del Arco Real, como extensión o complemento del grado de Maestro Masón, y como puerta de entrada para cualquiera de los otros grados yorkinos. La única excepción a esta regla es el Grado de Marca, que ocupa una posición especial, que explicaré más adelante.
LA ESTRUCTURA GENERAL
Veamos en primer lugar la estructura general de los grados superiores del Rito York.
Una palabra respecto al uso de la expresión "Grados superiores". En honor a la verdad, existe una larga polémica respecto a este tema. Según algunos pensadores masónicos, no existe ningún grado "superior" en importancia al Sublime Grado de Maestro Masón, considerado la cumbre y epítome de la Francmasonería. Estos autores hacen gala de ingenio para inventar adjetivos tales como "adicionales", "suplementarios", "laterales", o "accesorios", para evitar referirse a ellos como "Superiores". Personalmente, me parece una sutileza innecesaria. Los grados superiores son superiores en el sentido de que están construidos "por encima" del grado de Maestro Masón. Estos grados complementan, explican y expanden los conocimientos del hermano que los recibe, y si bien no son indispensables para ser considerado un buen Masón son sin embargo necesarios para llegar a ser un Masón ilustrado.
El primer grado o ceremonia en este contexto, y que sin duda reviste la mayor importancia, es el grado del Arco Real que actualmente no se otorga dentro de la Logia, sino en un Capítulo. En algunos países, como Escocia e Israel, este grado ocupa el tercer lugar en el Capítulo, siendo precedido por los Grados de la Marca y de Excelente Maestro.
Este es el sistema imperante en Escocia, donde, sin embargo, también las Logias simbólicas están autorizadas a conceder el grado de la Marca.
En Inglaterra, en cambio, el Grado de la Marca es totalmente independiente de la Masonería simbólica y las Logias de la Marca están agrupadas en una Gran Logia de la Marca. El grado de Excelente Maestro fue incorporado a los Grados Crípticos, de los que hablaré más adelante, mientras que el Arco Real funciona dentro del marco de la Gran Logia Unida, en Capítulos dependientes o agregadas a las Logias Simbólicas. Esta es la situación imperante desde la unión de 1813, cuando la actual Gran Logia Unida de Inglaterra recibió su estructura actual y para conservar la estructura trigradal de la Francmasonería, se aceptó que el Arco Real representa un "complemento" del grado de Maestro.
En los Estados Unidos, existen dos grados intermedios entre el de la Marca y el Arco real; Post Master (V.M.P.) y Muy Excelente Maestro (conocido también como el paso de los velos). El primero sirve para instalar al hermano en forma simbólica en el trono de Salomón, permitiéndole así tomar la presidencia de un Capitulo del Arco Real.
En Irlanda la situación es todavía distinta. Muchos de los grados yorkinos se trabajan allí como parte de la Comendaduria de los Templarios. Además, la leyenda fundamental en el ritual del Arco Real en Irlanda se basa en la reconstrucción del Templo por el rey Josías, y no por Zerubabel, como en los demás países.
MARINOS DEL ARCA REAL
Este grado aparece alrededor de 1790. Se otorga en una Logia de Marinos del Arca Real, generalmente agregada a una Logia del Grado de la Marca. En Inglaterra existe un Consejo del Arca Real de Grandes Maestros.
ORDEN DE LA CRUZ ROJA DE CONSTANTINO
Esta es una orden masónica cristiana, que comprende tres grados: Cabal/ero de la Cruz Roja de Constan tino, Caballero del Santo Sepulcro y Caballero de San Juan Evangelista.
CABALLEROS TEMPLARIOS Y CABALLEROS DE MALTA
El nombre completo de la Orden es; Ordenes Unidas Religiosas, Militares y Masónicas del Templo y de San Juan de Jerusalén, Palestina, Rodas y Malta, en Inglaterra, Gales y Provincias de Ultramar. Está organizada en grupos llamados Comendadurías y Prioratos. Es una orden exclusivamente cristiana.
SACERDOTES CABALLEROS TEMPLARIOS DEL ARCO REAL
Esta también es una orden cristiana, que funciona en Tabernáculos reunidos en un Gran Colegio. Otorga 32 grados, con nombres tales como Maestro del Azul o Caballero de Salomón, Caballero de los Tres Reyes o de la Balanza, Caballero de Eleusis y Caballero de la Cruz Ryla o Rosae Crucis.  
ORDEN REAL DE ESCOCIA
Es posiblemente la Orden masónica más antigua aparte de la Masonería Simbólica. Es también una de las más prestigiosas por su exclusividad. Hay pruebas documentales de la existencia de varias Logias de esta Orden en Londres en 1741. Comprende dos grados; Heredom de Kilwinning y' Caballero de la Rosa Cruz. Es una orden exclusivamente cristiana.
EL ARCO REAL
La primera mención escrita del Arco Real (Royal Arch) data de 1743 y se refiere a una procesión realizada en Irían-da, donde un arco designado como "Real" fue llevado por dos "Excelentes" Masones. El mismo año fue publicado un libro por un Don Dassigny, contando las malandanzas de un cierto señor que afirmaba ser Maestro del Arco Real de la ciudad de York, y que procedió a admitir otros hermanos en su organización masónica" hasta ser desenmascarado por otro hermano que había recibido cl grado en Londres.
El Arco Real se extendió rápidamente por todas las islas británicas, y era especialmente popular en las logias pertenecientes a la segunda Gran Logia, la de los "Antiguos", fundada alrededor de 175 1, quienes aceptaban al Arco Real como un cuarto grado dentro del marco de la Gran Logia. Eventualmente los Capítulos del Arco Real se integraron en un Capítulo Supremo alrededor de 1771. Los "Modernos" (la primera Gran Logia, fundada en 17 17) se resistieron a reconocer un cuarto grado, ni ningún otro grado superior, pero lo único que lograron es que los hermanos pertenecientes a las logias de los Modernos tomaran el Arco Real por su cuenta, en forma más o menos subrepticia, creando luego capítulos independientes - es decir, sin relación con la Gran Logia - y que finalmente se unieron formando otro Capítulo Supremo, no reconocido por la Gran Logia.
Esta situación se solucionó en 1813 con la unión de las dos Grandes Logias, cuando la nueva Gran Logia Unida de Inglaterra adoptó en la práctica casi todas las ideas y principios de los "Antiguos". Para no violar el precepto o landmark, que la Francmasonería se compone de sólo tres grados, el Arco Real no fue llamado un cuarto grado, sino que fue aceptado como "complemento" del grado de Maestro Masón. Los dos Capítulos Supremos del Arco Real se unieron finalmente en 1817. Los tres Grandes Principales en Inglaterra son, por tradición, los tres Oficiales más altos de la Gran Logia Unida, manteniendo la identificación entre ambas organizaciones.
En Inglaterra cada Capítulo está relacionado con una Logia específica, aunque puede aceptar hermanos de otras Logias e incluso llevar otro nombre. La condición para ser aceptado es haber sido Maestro Masón por lo menos un mes. Para ser Principal, en un Capítulo, sin embargo, se exigía que el candidato haya sido Venerable Maestro en una Logia, si bien este requisito ha sido abandonado.
La situación es distinta en el resto del mundo, donde las Grandes Logias sólo trabajan los tres grados masónicos fundamentales. Los Capítulos del Arco real están regidos por un Capítulo Supremo en cada país, y existe también un Gran Capítulo General de los Estados Unidos de América (formado en 1806), que en 1954 se transformó en el Gran Capítulo Internacional.
EL GRADO DE LA MARCA
Como ya se ha mencionado, el Grado de la Marca funciona en algunos países en forma independiente, y en otros, como Israel, precede al Arco Real. En realidad se trata de dos grados, Masón de la Marca y Maestro de la Marca, que se otorgan en forma consecutiva en el curso de una misma ceremonia, al punto que los candidatos ni siquiera se dan cuenta que han pasado dos ceremonias. La marca es un grado de raíces netamente operativas, sin ninguna conexión con el resto de las leyendas masónicas.
En Escocia, cuando lo otorga una Logia simbólica, trabaja en segundo grado. Es preciso observar que la Logia no puede otorgar ningún otro grado superior, de manera que lo normal es que el hermano que recibe el Grado de Maestro de la Marca ingresa inmediatamente a un Capítulo del Arco Real.
RITO YORK Y RITO ESCOCÉS
No podríamos tratar de los grados superiores yorkinos, sin mencionar la otra gran rama de la masonería filosófica y caballeresca, el Rito Escocés. No debe sorprendernos que muchas de las ceremonias (o "grados") existan en forma paralela en ambos sistemas. Tal como se explicó en un comienzo, todas estas ceremonias se practicaban en forma totalmente anárquica. En Francia fue evolucionando el sistema de grados llamado Rito de Perfección, que alcanzó a tener 25 grados, estableciendo una gradación y normalización de los trabajos. Posteriormente se agregaron los grados hasta alcanzar el número de 33, creando el Rito Escocés Antiguo y Aceptado en su forma actual (dirigido, desde 1801, por un Supremo Consejo del Grado 33º. en cada país).
En las islas británicas la sistematización descrita arriba no tuvo lugar, y los distintos grados continuaron su vida independiente, uniéndose sólo en forma parcial, dentro de los marcos que ya he citado. Sin embargo, en sus orígenes, todos o casi todos los grados o ceremonias existían de ambos lados del canal de la Mancha. EL Arco Real mismo fue también integrado dentro del sistema escocés como un grado intermedio, y los grados Templarios aparecen en la escala de grados escoceses casi en la cima. La sistematización y orden instituidos por el Rito Escocés explican su éxito en extenderse rápidamente por todo cl mundo, mientras que el sistema yorkino estaba hasta hace poco circunscrito a los países de habla inglesa, especialmente aquellos que en algún tiempo habían formado parte del Imperio Británico.
OBSERVACIONES FINALES
El mundo de la Francmasonería es mucho más complejo y variado de lo que uno supone al entrar a él. Incluso hoy en día, cuando ya la fiebre creativa de los siglos pasados se ha calmado y las estructuras masónicas están solidificadas, por así decir, existe todavía un número enorme de distintos ritos, rituales, grados y títulos masónicos, con amplias variaciones entre un país y otro.
No he tocado siquiera el problema de la regularidad, que divide a las Grandes Logias, Grandes Orientes y Supremos Consejos en campos irreconciliables entre sí.
Existe un hecho de gran importancia con referencia al Arco Real y los grados superiores yorkinos.
El Arco Real es teológicamente neutro, y está abierto a los Masones que practican cualquier religión. Sin embargo, muchos de los grados superiores del Rito York están reservados exclusivamente para quienes profesan la religión cristiana y creen en la Santísima Trinidad. Esta imposición religiosa, que viola las normas de fraternidad y universalidad impuestas por la Gran Logia de Inglaterra desde su creación, y reiteradas por todas las Grandes Logias regulares desde entonces, puede explicar el escaso desarrollo de esta rama de la Masonería en la América Latina, donde el laicismo es casi sinónimo con Masonería.
Finalmente, quisiera dejar planteado otro problema que atañe a los Grados Superiores, y es que la proliferación de ceremonias, títulos y grados impulsa a algunos Hermanos a convertirse en "coleccionistas de grados". Hay hermanos que están prontos a aceptar cuánto grado se les ofrezca, para recibir un nuevo diploma y una nueva medalla. Después, no asisten a las ceremonias posteriores ni les interesa realmente estudiar el simbolismo y la historia de estos grados.
Esto no le hace daño a nadie, es cierto, pero el Masón que procede de esta manera pierde una valiosa oportunidad de incrementar no sólo sus conocimientos de Masonería, sino su Comprensión de conceptos filosóficos y psicológicos de la mayor importancia para su propio desarrollo y satisfacción personales.
Cada grado que tomamos, debemos aceptarlo como una nueva puerta abierta, una nueva invitación a estudiar, un nuevo desafío. Si leemos el ritual en casa, no una, sino varias veces, y si luego asistimos a la ceremonia cuando se vuelve a ejecutar, y posiblemente tomamos parte activa en ella como uno de los Oficiales, y si memorizamos algunas líneas, todo esto nos permitirá ahondar en la liturgia y entender mejor lo que ella nos quiere transmitir.
Todo este proceso es parte del pulimiento de la piedra bruta, y no tiene nada que ver con los títulos ostentosos, las medallas relumbrantes, ni los diplomas ornamentados.
La satisfacción de recibir un grado masónico será multiplicada cien veces, cuando lleguemos a comprender qué es lo que recibimos en realidad, y en qué forma nos toca personalmente.

martes, 19 de marzo de 2013



LA BELLEZA SIMBÓLICA DEL REAL ARCO

C.D. Molina García
REAL ARCO, Raíz, corazón y médula de la Masonería
S. al S.

La Masonería Simbólica se relaciona con los hechos y circunstancias asociados a la construcción del Templo del Rey Salomón, que fue el primer lugar fijo de veneración al Dios de Israel, luego de muchos años de devoción en Tabernáculos. El Templo de Salomón fue también el lugar donde se depositó el Arca de la Alianza luego de la peregrinación por el desierto. En estos tiempos se afirmó: "Él construirá una Casa en mi Nombre y yo estableceré el trono de su Reino por siempre". Para el Masón, el significado de este enunciado es que él mismo, en su propio ser, deberá levantar una superestructura, "perfecta en sus partes y honorable para el constructor".
Por otra parte, y como sabemos, el Tercer Grado de la Masonería Simbólica, o del Antiguo Gremio narra, en la lógica del simbolismo, algunos momentos vividos durante el proceso de construcción de dicho Templo y en los cuales los protagonistas relevantes fueron el propio Rey Salomón, Hiram Rey de Tiro y un arquitecto mítico denominado Hiram Abiff, —auténtica figura legendaria y alegórica de las enseñanzas iniciáticas—. Durante estos sucesos, T. CC. ingratos deseosos de obtener la Palabra del Maestro, apelativa del conocimiento iniciático, tratan de obtenerla por la fuerza sin más mérito que la amistad con Salomón y con Hiram Abiff. Pero éste, celoso de la tradición, se niega a proporcionarla llevándosela a la tumba ante los embates de los compañeros traidores sin obtener satisfacer su ambición. Aparentemente, la verdadera Palabra iniciática queda para siempre en la Tumba sin poder ser conocida por los hombres, pero el Rey Salomón, Hiram Rey de Tiro e Hiram Abiff, previendo y conociendo la ambición y las pasiones humanas, la habían inscrito en una piedra, la cual ocultaron en una bóveda secreta indicando que tal Palabra no podría ser pronunciada sino por los tres reunidos y bajo un A. V., y una vez concluido el Templo.
El Grado del Real Arco es la consumación y a la vez el complemento perfecto del Tercer Grado de la Masonería del Antiguo Gremio, y puede decirse con toda propiedad simbólica, que ningún Maestro Masón está completo si carece de este grado, pues no existe rito masónico alguno que haga referencia a este misterio. Por esta razón, el Real Arco es la progresión natural en la Francmasonería, toda vez que provee al iniciado la obtención de los "auténticos secretos" y no los secretos substitutivos que se comunican durante la ceremonia de la Exaltación. En Inglaterra, el Real Arco es el complemento de la Logia Azul, y como tal forma parte integral de la Masonería Simbólica Inglesa.
En efecto, el Maestro Masón estudioso y convencido de que la Francmasonerí a es algo más que ceremonias formales, está ansioso de realizar un progreso diario en el conocimiento Masónico y clama por más Luz en Masonería. Esta luz adicional se deriva del hecho de considerar que el Tercer Grado nos deja la huella de la curiosidad y la perspectiva de hay algo más que debemos conocer y no quedarnos con secretos sustitutos derivados de los hallazgos obtenidos al descubrir los restos de Hiram. Por ello la belleza simbólica del Real Arco y la posibilidad de descubrir, a través de él, la Palabra verdadera.

Antigüedad del Real Arco
El Real Arco, que en América se encuentra consignado en los Capítulos del Rito de York, apela a la forma más antigua de la Masonería especulativa hoy conocida en el mundo entero. No existe testimonio más remoto de lo que pudo haber sido el trabajo simbólico especulativo en las Logias inglesas y americanas que el Real Arco, pues como sabemos las formas de ritualidad que en México y en América Latina denominamos como “rito escocés”, no son sino esquemas litúrgicos franco americanos, es decir, formas ritualísticas creadas —o inventadas— en Francia y adoptadas exitosamente en los países hispanoamericanos. La Masonería de York data del año 926, A. D., precisamente en los tiempos del Rey Athelstan, del condado y hoy ciudad de York. Por su parte, la primera referencia impresa a la Masonería del Real Arco aparece en Dublín (Irlanda) en 1743, en un diario conteniendo un informe de..."el Real Arco llevado en procesión por dos Excelentes Masones". Lawrence Dermott, el segundo Gran Secretario de los masones "Antiguos" o de York, fue siempre un entusiasta del Real Arco, al que describió como "la raíz, corazón y médula de la Masonería".
El Real Arco que conocemos aquí nos viene de los Estados Unidos, el cual a su vez proviene de Inglaterra y nos brinda, con una belleza sin igual, los elementos esenciales de la Masonería gremial. En Inglaterra el Real Arco forma parte de la Maestría, y no es sino en los Estados Unidos que se ha decidido, desde finales del siglo XVIII, trabajarlo en Capítulos por separado. Mucho queda por decir de este hermoso grado. Mucho queda por reflexionar de la armonía exquisitamente simbólica y espiritual del Rito de York. S. al S.

Se puede abundar más en Aimon Rezon, versión “antigua” de las Constituciones de Anderson.

Fraternalmente,

Juan Carlos Rodriguez S.
Tercer Principal

domingo, 10 de marzo de 2013

Una nueva etapa en la Masonería Chilena



Con el fin de desarrollar y mantener viva las tradiciones del sistema masónico anglosajón, un grupo de HH MM que trabajan bajo el Rito Emulación mal llamado Rito York, han tomado el camino de crear el Supremo Gran Capitulo Real Arco de Chile.
Este Supremo Gran Capitulo nace con la unión de tres capítulos instalados y consagrados previamente, los que trabajan con el Rito Real Arco Domatic.
Los Hermanos fundadores, libres pensadores todos y conscientes de que la verdadera masonería esta fundada en los valores de la tolerancia, la fraternidad y la libertad, teniendo como norte la Universalidad de la Orden, trabajaran independiente a todo poder masónico e invitan a todo MM independiente del Rito en que trabaje, a participar de este acontecimiento histórico.